La reciente megaoperación en Latinoamérica por la que se va a crear un grupo que integre a Avianca, Viva y la brasileña Gol significa una evidencia más de que el negocio aéreo necesita escala para sobrevivir y de que eso se consigue con fusiones y absorciones, como se aspira con Iberia y Air Europa (Avianca crea Abra y amenaza el liderazgo de Latam Airlines Group).
El nuevo grupo Abra, que también incluirá una participación de Sky y cuyos detalles ha venido revelando REPORTUR.co, representa la mayor operación en el subcontinente americano desde la de Lan y Tam para concebir Latam, y se ha firmado con el fin de buscar volumen para abaratar la compra de aviones y combustible, junto a reducir costes de personal evitando duplicidades, así como para lograr una mayor eficiencia con las rutas y los programas de fidelidad.
En un entorno en el que cada vez la industria de la aviación consolida en menos grupos, incluso con una Ryanair que volteó su dogma para integrar a Lauda y otras, los proyectos aéreos que se queden solos tendrán muy difícil sobrevivir dado que sus rivales gozarán de ventajas competitivas muy superiores.
Un conglomerado particular es el de Indigo con sus aerolíneas Frontier (USA), Jetsmart (Chile y Argentina), Volaris (México), y Wizz Air (Hungría), demostrando que las integraciones pueden ser sin sinergia de rutas, aunque nunca gocen de las mismas ventajas de quienes comparten mercados.
Así, en USA, como viene informando REPORTUR.us, está cerrándose además la compra de Spirit por parte de Frontier tras imponerse a Jetblue, en un mercado desde el que se ejerce bastante control sobre Aeroméxico por parte de una Delta que también junto a Qatar es el accionista industrial más relevante en Latam.
En Europa las excepciones de entre las que siguen en solitario son Easyjet y Air Europa, y ambas coinciden en ser señaladas como las más débiles frente a sus rivales más directos, en un entorno en el que cabe citar a Tap en Portugal o ITA en Italia, seguidas por los grandes grupos del continente.
Air Europa e Iberia representan una muestra casi única de dos aerolíneas que se solapan en un muy amplio porcentaje de sus rutas, lo que supone una anomalía en el mercado aéreo mundial donde apenas hay casos de dos aerolíneas compitiendo en un mismo hub (Iberia entrará en Air Europa antes de que acabe el año).
El concepto de competencia de una red de rutas en aviación suele caracterizarse por presentar a rivales locales en cada conexión, pero resulta bastante inverosímil que dos mismas aerolíneas pugnen además en la mayoría de sus destinos junto además a los operadores locales.
De este modo, el contexto de la coyuntura en estrategia aérea empuja cada vez con más fuerza a que los proyectos con mayores fundamentos para sobrevivir serán aquellos que, primero, tengan más volumen, y segundo, mayores sinergias en sus operativas, lo que prueba que la apuesta de Gobierno por favorecer la unión de Iberia y Air Europa es una opción en la que todos ganan.
lo que prueba que la apuesta de Gobierno por favorecer la unión de Iberia y Air Europa es una opción en la que todos ganan
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