La escena tiene pocos precedentes y la cuentan todos los medios occidentales con presencia en Moscú. Putin ha armado un escándalo porque sus subalternos le vienen contando que pueden fabricar todos los aviones que quieran, pero ahí nadie ha visto ninguno (Putin y su guerra diezman la aviación comercial rusa).
Durante la primera reunión formal del gobierno en este 2023, el presidente Putin se dedicó varios minutos a fustigar en público a Denis Manturov, el ministro responsable de aviación, por ser un burócrata. "Demasiado tiempo, están necesitando demasiado tiempo", le gritó. "¿Qué demonios estás haciendo que los aviones no aparecen? ¿Cuándo habrá contratos para firmar?"
Enfadado, Putin le dijo que no estaba claro cuántos aviones iba a entregar. Manturov inicialmente respondía. Explicó que los números están claros pero que la capacidad de producción de motores es limitada.
Manturov es responsable de la fabricación de aviones, tanto civiles como militares, en Rusia. Ha sido siempre muy leal y es ministro desde 2012. Había iniciado una perorata sobre la fabricación de motores cuando Putin lo interrumpió y, mientras iba exaltándose a sí mismo, terminó por humillarlo.
Manturov le dijo que iba a conseguir su objetivo en unos meses, pero Putin le contestó: "Hazlo en un mes. ¿No llegas a entender en qué situación estamos?"
El ministro contestó que intentaría hacerlo, a lo que Putin le advirtió "no intentes hacerlo, hazlo".
La industria de la aviación rusa se presentó como absolutamente capaz de reemplazar los aviones occidentales, cosa que ningún experto considera probable en el corto plazo. De hecho, algunas aerolíneas firmaron cuantiosos contratos de compra (Aeroflot, por ejemplo, adquirió 339 aviones) que nadie sabe cómo se van a cumplir porque, en general, la industria rusa necesita componentes occidentales.
Manturov había dicho en su informe que va a entregar 700 aviones civiles para 2030.
Putin le dijo que no estaba claro cuántos aviones iba a entregar.
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