El sector empresarial, turístico y privado de la Riviera Maya envió una carta al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y Rogelio Jiménez Pons, director general de Fonatur, para solicitar el cambio del trazo del Tren Maya en su paso por Playa del Carmen y su integración al proyecto del Anillo Periférico de la ciudad, lo cual a decir de los empresarios ayudará a reducir costos y afectaciones en beneficio del éxito de la obra.
“Esta propuesta, que tiene el menor impacto negativo en lo económico y social durante la construcción y operación del Tren Maya, generará importantes ahorros de fondos federales en la planeación y construcción, y traerá beneficios económicos y sociales para las zonas marginadas de la ciudad”, destaca la carta de la Asociación de Hoteles de la Riviera Maya, el Consejo Coordinador Empresarial de la Riviera Maya y otras organizaciones turísticas y privadas del Municipio de Solidaridad, dirigida al Jefe del Ejecutivo y al titular de Fonatur.
El Plan de Desarrollo Urbano ya contempla el trazo del Anillo Periférico y el ancho necesario para integrar al Tren Maya, siendo actualmente Villas del Sol el único desarrollo habitacional que atraviesa este anillo periférico, el mismo que cuenta con el ancho necesario para integrar este proyecto ferroviario.
“El nuevo Anillo Periférico impulsará el desarrollo económico y potenciará inversiones paralelas en proyectos de conectividad y servicios al tiempo que se consolida la integración social y urbana”, destacaron los firmantes, quienes añadieron que el tiempo de ejecución se calcula en tres años y los beneficios serán los pobladores de Playa del Carmen y Puerto Aventuras.
Los empresarios destacaron que el actual trazo del Tren Maya, ya sea que se construya sobre la carretera federal 307 o a lo largo del derecho de vía de las líneas de alta tensión de la CFE, generará la fragmentación social y urbana de Playa del Carmen, afectaciones no sólo en imagen, accesibilidad y movilidad, y en consecuencia marginación y pérdida de atractivo y competitividad.
“El trazo del Tren Maya a través del centro urbano de Playa del Carmen inevitablemente ocasionará una ruptura en ciudades, una con acceso al mar, playas, servicios turísticos, comercio, vivienda de medio y alto nivel, mayor concentración de oportunidades y riqueza y otra, una ciudad dormitorio y de aprovisionamiento y servicios”, dictaba la misiva.
El sector empresarial refirió que el actual trazo incrementará exponencialmente el costo total de la construcción por la modificación de las líneas de alta tensión y compra de tierras para cumplir las exigencias para el derecho de vía del Tren Maya, mismas que no se cumplen en ninguna de las dos ubicaciones propuestas lo que implica la compra y expropiación de propiedad privada, lo cual “derivará en juicios largos, costosos, con pocas probabilidades de éxito para el gobierno federal”.
Argumentan que mantener el proyecto actual provocará afectaciones viales importantes lo cual incrementará hasta en 3 horas adicionales los tiempos de traslado en un viaje sencillo y de 6 horas en viajes de ida y vuelta.
Esta carta dirigida al presidente y al dirigente de Fonatur, se entregó con copia al gobernador del estado de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, y a la presidenta municipal de Solidaridad, Lili Campos Miranda.
Las organizaciones manifestaron en la misma su respeto y confianza en que las autoridades de los tres niveles de Gobierno tomarán decisiones fundamentadas, consensadas y sostenibles en torno al Tren Maya, por el éxito de la Riviera Maya, uno de los destinos turísticos más importantes de México.
Toni Chaves, presidente de la Asociación de Hoteles de la Riviera Maya, como publicamos en REPORTUR.mx, ha manifestado la preocupación del sector por la afectación que conllevará la construcción del Tren Maya, pues son 40 hoteles que deberán vender 17 metros lineales pero si se niegan serán expropiados. (Tren Maya: 40 hoteles afectados por su construcción)
Toni Chaves, presidente de la Asociación de Hoteles de la Riviera Maya, como publicamos en REPORTUR.mx, ha manifestado la preocupación del sector por la afectación que conllevará la construcción del Tren Maya, pues son 40 hoteles que deberán vender 17 metros lineales pero si se niegan serán expropiados.
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