La cadena Riu se está volcando en la restauración de los arrecifes en México a través de Oceanus, una acción que forma parte de la Estrategia de Sostenibilidad Proudly Committed de la hotelera española que cuenta con más hoteles en Cancún. El deterioro de los arrecifes de coral del Caribe mexicano está provocado, en gran parte, por la actividad turística.
Todos las actividades y resultados de Oceanus no serían posible sin el apoyo de socios y donantes. Cada año se plantean las estrategias a seguir, y cada año, la recaudación de fondos es un trabajo importante de la asociación para poder cumplir sus objetivos.
Por todo ello, socios como Riu son una parte importante de los logros de Oceanus. Han logrado comprender que trabajar en la restauración de arrecifes no es una tarea fácil, ni rápida, y que solo el apoyo constante y a largo plazo puede generar resultados exitosos.
«Contar con hoteles RIU como parte de nuestros aliados da a otros posibles donantes la confianza para unirse a este esfuerzo, además, mantiene su equipo mantiene un trabajo cercano con nosotros ayudando a concretar ideas y acciones que son necesarias para escalar los esfuerzos de restauración», explica Gaby Nava, fundadora de Oceanus.
Nava destaca que Riu está colaborando en la creación de un Centro Oceanus para la Restauración de la Biodivesidad, el cual además de servir como Estación de Campo para las labores en el mar, «podrá ser un centro de visitantes y aula de trabajo para multiplicar las acciones de educación ambiental». «Necesitamos más empresas que les interese dejar una huella positiva en su localidad y que ayuden a crear más acciones de regeneración», añade.
Los arrecifes de coral en el Caribe Mexicano están muy amenazados. La falta de conocimiento de los beneficios ecológicos y económicos que proporcionan los arrecifes sanos es una de las problemáticas más fuertes; especialmente en el sector gobierno, quienes toman las decisiones de desarrollo el cual afecta la conectividad e integridad de los ecosistemas costeros incluyendo a los arrecifes de coral.
«Es probable que por estar sumergidos en el mar donde no muchas personas logran observar su belleza, y por ende su deterioro, los arrecifes pasan generalmente desapercibidos a la hora de hacer el recuento de daños. Desde hace más de una década, el acelerado desarrollo costero y urbano en las costas de Quintana Roo, han roto la conectividad entre ecosistemas y han impactado el arrecife de coral reduciendo su resistencia ante enfermedades y tormentas al romper el equilibrio natural que los mantiene saludables», subraya Gaby Nava.
La contaminación, la eutrofización, y la sedimentación (ya sea por eliminación de pastos marinos y vegetación costera, y/o por rellenos de playa), además de las malas prácticas en actividades turísticas (anclaje, alimentar a la fauna, encallamientos, desecho de residuos, mal manejo de grupos) tienen también un efecto dañino en la dinámica natural de los arrecifes.
En 2023, la elevación de la temperatura global en el océano, como parte de los efectos del cambio climático global, impactaron aún más a los corales causando un blanqueamiento masivo en todos los arrecifes del mundo, observando hasta el 100% de mortalidad en corales de distintas especies en algunos sitios.
«La estrategia de Oceanus se centra en la acción directa sobre los arrecifes, dentro del mar, con una meta de recuperación de sitios a lo largo del Caribe Mexicano y el Golfo de México, incrementando el número de corales vivos y sanos, que al crecer puedan reproducirse sexualmente y ser fuente de larvas para otros sitios, multiplicando así el esfuerzo de la restauración. A pesar de contar con resultados muy positivos este año, hemos encontrado que es necesario duplicar los esfuerzos en tierra», comenta la fundadora de Oceanus.
No hay comentarios:
Publicar un comentario