Mucho ha llovido desde la alianza fallida de Air Europa y Ryanair. Firmada en mayo de 2017, ambas compañías se las prometían muy felices con un acuerdo calificado por el propio Michael O’Leary como “apasionante”. La colaboración fue un auténtico fracaso y se rompió de forma abrupta a los pocos meses de su activación (Ryanair asume el fracaso de su alianza con Air Europa).
Ryanair ha pasado en pocos años de postularse como el gran aliado de Air Europa a convertirse en su principal enemigo, aprovechando cualquier entrevista o acto público para cargar con una inusitada dureza contra el rescate estatal de 475 millones de euros concedido por el Gobierno español a la compañía de Globalia.
El último ejemplo es la reciente aparición de su CEO, Eddie Wilson, en el Confidencial. En declaraciones a este medio acusa al Ejecutivo de haber tirado el dinero de los contribuyentes entregándoselo a Air Europa en vez de haber dirigido esos fondos “a las tasas aeroportuarias”, medida con la que “hubiésemos crecido mucho” (Ryanair ataca: “En vez de rescatar aerolíneas quebradas como Air Europa deberían bajar las tasas”).
“Cuando traemos pasajeros, estos se gastan el dinero de forma desproporcionada en la economía. Pero, en cambio, el dinero se fue por el retrete. Los españoles son muy buenos manifestándose, así que ¿dónde están ahora las manifestaciones?”, exclama el directivo.
Wilson afirma que “si Air Europa dejase de existir de la noche a la mañana, Ryanair, Vueling o Easyjet ocuparían ese vacío de vuelos”. “En cambio, ahora se van a gastar casi 1.000 millones de euros para apoyar a los propietarios de Air Europa. ¿Para qué?”, lamenta (Ryanair acudió a la Audiencia Nacional para tumbar el rescate de Air Europa).
En esta línea, carga con dureza contra los propietarios de la compañía de Globalia, criticando que “las únicas personas que se benefician de Air Europa son la familia que la controla, los accionistas”. ¿Por qué es Air Europa vista como estratégica en España? Es una locura y el mayor gasto de dinero que he visto jamás en tan poco tiempo”, zanja.
“Cuando traemos pasajeros, estos se gastan el dinero de forma desproporcionada en la economía. Pero, en cambio, el dinero se fue por el retrete. Los españoles son muy buenos manifestándose, así que ¿dónde están ahora las manifestaciones?”, exclama el directivo.
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