Invitado por la comisión de descentralización y poder local de la Asamblea Nacional, expusimos en su seno, así como en la fracción parlamentaria de la MUD en su conjunto, la importancia y trascendencia que tiene para el país, la recuperación y fortalecimiento del Estado federal descentralizado (federalismo cooperativo), la política de descentralización (administrativa y fiscal) así como la participación ciudadana amplia y plural, en la planificación y gestión de los asuntos públicos.
Como hemos venido planteando, el país no puede continuar operando con dos constituciones paralelas, violándose descaradamente los principios fundamentales de la Constitución de 1999. Es por ello, que el país está experimentando en medio de una crisis sin precedentes, un choque inadmisible entre el poder público de la Constitución de 1999 y el poder popular de la Constitución apócrifa o sociológica, con la que el régimen pretende burlar las decisiones de la soberanía popular, con la anuencia servil del Poder Judicial. Una de las vías para recuperar la esencia del Estado venezolano establecido en el texto constitucional vigente, es devolviendo al poder público su supremacía sobre el inexistente poder popular, para lo cual es de primera importancia desarrollar el espíritu, propósito y razón del artículo 4 de la Constitución y de los 11 artículos adicionales que en ese texto refuerzan y amplían al primero.
Para lograr ese propósito, propusimos a la representación popular un conjunto de leyes para un nuevo federalismo verdaderamente democrático y participativo, con el fin de enfrentar al nuevo centralismo que se esconde detrás del Estado comunal de inspiración marxista que el régimen pretende imponernos. Además de una ley orgánica sobre el Estado federal descentralizado que acabe con los mitos del Estado comunal y el poder popular, propusimos 13 leyes nuevas o reformas, en diferentes ámbitos del tema. Por su importancia merecen citarse la reforma urgente que requiere la Ley del Poder Público Municipal, para que nuevos municipios y parroquias con directivos electos por el voto popular atiendan los problemas colectivos; y la nueva ley de Hacienda Pública Estadal, que contribuya a un reparto territorialmente más justo de los recursos públicos.
Creo que estas ideas, propuestas inicialmente en el documento presentado por la Academia de Historia del estado Zulia en octubre de 2015, comienzan a tomar el camino apropiado. Si es así, ahora sí se iniciaría en Venezuela una verdadera revolución federal.
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