La crisis que atraviesa el mercado aerocomercial colombiano con la suspensión de vuelos de Viva Air y Ultra Air encendió el enojo del presidente Gustavo Petro al calificarlas de “estafadoras” por perjudicar a miles de usuarios con la venta de tiquetes.
La casi desconexión en la que quedó la isla de San Andrés, uno de los sitios turísticos más importantes del país, despertó la ira del jefe de Estado en medio de una reunión con embajadores en la casa presidencial.
“Ahora que San Andrés se puso de moda en los medios de comunicación por el tema de las aerolíneas estafadoras y que la golpeó económicamente, hay que reivindicar cuál es nuestro proyecto sobre San Andrés y Providencia”, aseveró Gustavo Petro durante su intervención.
Con el objetivo de intentar subsanar la situación, Petro ordenó que la aerolínea pública Satena cubriera los destinos abandonados por Ultra Air y Viva Air.
Como reveló REPORTUR.co, las agencias de viajes han sido las más afectadas por el cese de la operación de las low cost Viva Air y Ultra Air, pues tenían precompras millonarias de sillas con las compañías aéreas por las que deben responder a sus clientes, además de lidiar con las quejas de los usuarios (Ultra y Viva Air dejan tiradas a las agencias con las quejas de los usuarios)
Con el objetivo de intentar subsanar la situación, Petro ordenó que la aerolínea pública Satena cubriera los destinos abandonados por Ultra Air y Viva Air
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