Una de las grandes competiciones de automovilismo podría regresar a la capital española 42 años después. Madrid ya ha entrado en la lucha por albergar uno de los grandes premios de Fórmula 1 a partir de 2026, lo que supondría un enorme impacto económico en la región. (La Fórmula 1 sondea a Madrid ante la inestabilidad en Cataluña)
Según informa El Mundo, la idea sería que el fin de semana de competición se desarrollase en las instalaciones de IFEMA, y podría dejar en la capital una cifra aproximada de 5.000 millones de euros en 10 años. Dicho de otra manera, el espaldarazo rondaría los 450 millones anuales, suponiendo grandes beneficios a hoteles, restaurantes, taxis y lugares de ocio.
A la hora de realizar esta previsiones, se ha tenido en cuenta que asistirían alrededor de 120.000 aficionados, que se alojarían en la ciudad durante al menos tres días, que es lo que dura el Gran Premio. Se estima que prácticamente la mitad serían de origen extranjero, mientras que un 30% procedería de Madrid, y un 25% del resto de España.
De este modo, el gasto por visitante nacional se situaría en torno a los 600 euros, mientras que el del internacional crecería a los 950 sin tener en cuenta hotel, precio de la entrada, o transporte. Además, todo el personal que trabajaría en las escuderías y en el circuito necesitaría alrededor de 5.000 habitaciones para alojarse, con todo lo que ello supone para la empresa hotelera.
Se trata de una propuesta atractiva, que podría verse impulsada por los conflictos entre los directivos de la F1 y Barcelona, que actualmente alberga una de las fechas del calendario en Montmeló. Las constantes reivindicaciones políticas en Cataluña no gustan en el seno de los gestores, por lo que la ciudad condal podría tener los días contados.
De momento, Madrid ya ha estrechado lazos con la F1, ya que será sede de la The Exhibition F1, el primer gran evento internacional de este ámbito. Permitirá ver en primera persona los grandes trofeos, monoplazas e imágenes, y, con total seguridad, atraerá a una gran masa de fanáticos a la capital.
Dicho de otra manera, el espaldarazo rondaría los 450 millones anuales, suponiendo grandes beneficios a hoteles, restaurantes, taxis y lugares de ocio.
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