Aeromar estaría pasando por dificultades muy parecidas a las que Interjet tuvo antes de abandonar su operación, por lo que está generando expectativa. Uno de los más evidentes es la falta de inversión de sus dueños.
Al parecer, desde 2017 la familia Katz, no ha puesto capital en la aerolínea y esta no ha recuperado el número de pasajeros que tuvo antes de la pandemia, opera con 7 aeronaves en vuelos nacionales y por el contrario ha tenido una caída del 11% en junio, pese a la temporada alta.
Pero su baja en pasajeros a nivel internacional es mucho más alta, con 85% durante junio, descendiendo durante este periodo donde se ha incrementado el flujo de pasajeros extranjeros en el país, así lo informa El Financiero.
Por otra parte, los pagos a trabajadores no se hacen al parecer ni a tiempo e incompletos, luego de los acuerdos de descuentos salariales durante la pandemia, que se acercaban al 40% para pilotos, lo que le permitiría mantenerse a flote. Por el contrario, la aerolínea sigue con dificultades e incumpliendo con los acuerdos en pagos y sus dueños establecidos fuera del país.
Así mismo, están las deudas fiscales que suman al menos 70 millones de pesos por turbosina y a la administración del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), de donde le podría desalojar. También ha tenido problemas para obtener un crédito de US$75 millones con la banca de desarrollo que le aliviaría sus finanzas y pasar al AIFA. (Peligran los vuelos de Aeromar y Magnicharters desde AICM).
Sin embargo, la aerolínea acaba de anunciar nuevos vuelos hacia tres destinos como Mérida-Chetumal con seis frecuencias semanales, Mérida – Cozumel y Mérida-La Habana con cuatro frecuencias semanales, las cuales iniciarían el 21 y 22 de agosto respectivamente, así lo recoge Noticaribe.
Sin embargo, la aerolínea acaba de anunciar nuevos vuelos hacia tres destinos
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