Los gigantes tepuyes venezolanos, la casa de los dioses

Este Monumento Natural es considerado único en el mundo y es un deber conservarlo 

Odimar López

Tepuy es una palabra de lengua pemón-taurepán de la voz "Töpö", o en la lengua de los Arekuna "Tüpü", y significa "morada de los dioses".

Estos gigantes son las formaciones más antiguas del planeta. Los tepuyes del sur de Venezuela son montañas con paredes verticales y cumbres planas, otra muestra más de su belleza exuberante. La mayor parte de estas maravillas naturales ha sido poco visitada debido a su difícil acceso, por lo que deben ser protegidos y conservados.

En febrero de 1991, los tepuyes ubicados en territorio venezolano fueron declarados Monumento Natural. Más de un millón de hectáreas, en las cuales se encuentran estos ecosistemas únicos en el mundo, están protegidos por el Decreto 1.233.

La extraordinaria importancia del Parque Nacional Canaima es debida no solo a su enorme extensión, sino también a su gran variedad y diversidad de los recursos naturales y socioculturales que encierra, algunos de los cuales constituyen atributos tan sobresalientes y exclusivos que hacen de él un parque único, con unas enormes posibilidades de desarrollo y de aprovechamiento cultural y científico.

Por la belleza y la majestuosidad que allí se respira, el Monumento Natural Los Tepuyes es una pieza fundamental que complementa el abanico de opciones turísticas con las que cuenta el territorio venezolano, especialmente porque algunos de estos han sido declarados internacionalmente como únicos en el mundo.

Aunque el acceso está restringido, existe un número importante de agencias turísticas en el país que hacen posible poder disfrutar de su grandeza. Para conocer los ubicados en Amazonas la vía fluvial es la principal alternativa; para ir a la Gran Sabana, sector oriental del parque, se puede optar además por vía terrestre, y a Canaima, sector occidental, por vía aérea.

Lugares de interés
Por otra parte, no solo la flora y la fauna son de gran atractivo para científicos e investigadores, sino también las cavernas, lagunas, ríos y cascadas que se desprenden de las imponentes mesetas. Tal es el caso del Salto Ángel, la caída de agua más alta del mundo, la cual se origina en el Auyantepui. En este último se han descubierto diversos tesoros naturales que, al igual que el Roraima Tepuy y La Neblina, lo hacen formar parte de los tepuyes más importantes de Venezuela.

Ahora bien, en el sector occidental del Parque Nacional Canaima se encuentra el tepuy Kuravaina, el cual visité hace poco y pude llegar a su cumbre. Este tepuy es totalmente virgen y tiene una nueva ruta. La excursión comienza navegando por el río Carrao. Durante la navegación tendremos una vista hacia las extensas sabanas y bosque de galería donde podremos observar todos los tepuyes a distancia.

Si el cielo está despejado se pueden ver los tepuyes Nonoi, Kurun, Kusari, Kuravaina, Topochi y Auyantepui. Luego de 10 minutos de navegación ingresamos al estrecho canal Moroko, donde se podrá visualizar una fauna y vegetación variadas, como el árbol de la vida y el moriche Kuai, así como disfrutar del reflejo del río. El caño Moroko es un lugar ideal para la observación de aves.

Llegamos a un puerto donde desembarcamos y disfrutamos de otro ángulo extraordinario de los emblemáticos tepuyes. Iniciamos una caminata de alrededor de 50 minutos, pasamos por un hermoso bosque muy exuberante, con palmeras y arroyos provenientes del tepuy Kuravaina, para luego comenzar el ascenso hasta el tope, con un recorrido de 498 metros durante el cual se requiere de cierta condición física.

Mientras vas caminando se aprecia el espectacular paisaje, con una vista impresionante del valle de Kuraupa, quedando a nivel con los tepuyes Kurun y Kusari. Al llegar a la cumbre se ven los conucos hechos por los indígenas y la siembra. El descenso durante 30 minutos por las extensas sabanas hasta llegar al puerto es una experiencia única.

Conciencia ecológica
Está totalmente prohibido hacer fiestas en los tepuyes, llevar bebidas alcohólicas o colocar infraestructuras que afecten su entorno natural, ya que provoca un grave impacto ambiental y se pone en riesgo su frágil y rico ecosistema.

El impacto humano por actividades irresponsables tiene un efecto, no solo duradero, sino probablemente imposible de remediar, ya que sobre la cumbre de los tepuyes crece una vegetación única, sobre suelos extremadamente pobres y rocosos, lo cual los hace muy sensibles y de difícil recuperación una vez afectados.

Canaima es uno de los destinos turísticos más valorados en Venezuela y, desde 1994, fue designado patrimonio mundial por la Unesco.

Un parque nacional es un espacio protegido por el Estado por su inmenso valor, no solo ecológico sino simbólico. Debe ser tratado como un templo sagrado, con respeto. Los tepuyes son la casa de los dioses y es un patrimonio natural de nuestro país.

Las empresas de turismo, campamentos, guías, comunidades, tienen que seguir y respetar los reglamentos medioambientales destinados a proteger la fragilidad ecológica de los lugares, para eso está la Ley Orgánica para la Ordenación del Territorio sobre Administración y Manejo de Parques Nacionales y Monumentos Naturales.

En Venezuela hay 43 parques nacionales y 36 monumentos naturales en total, que equivalen a 21,76% del territorio.