Redacción Caribbean News Digital
El primer fin de semana de las vacaciones de primavera de 2021 ha traído grandes multitudes a las playas del sur de Florida, junto con la preocupación por la posibilidad de un brote de coronavirus.
Las vacaciones de primavera (conocido como spring break) suelen provocar estrés en ciudades como Fort Lauderdale y Miami Beach, pero este año se suma la preocupación por el COVID-19. Los líderes locales dijeron que dan la bienvenida a los visitantes a sus playas, pero subrayaron que tienen que cumplir las reglas.
No se permite el consumo de alcohol en la playa, y no se permite dejar Uber o Lyft a lo largo de la A1A , que estaba llena el sábado por la tarde. Se han colocado carteles electrónicos para recordar a los bañistas que mantengan su distanciamiento social.
En Miami Beach, los líderes de la ciudad también esperan mantener las cosas lo más tranquilas posible, con la playa abierta de 7 a.m. a 7 p.m. y los cafés de la acera cerrando a medianoche.
Los funcionarios de los condados de Broward y Miami-Dade están instando a los juerguistas a que se diviertan de forma responsable o se arriesguen a ser arrestados. También debatieron la posibilidad de aplicar un toque de queda durante un periodo de tres semanas, pero decidieron no hacerlo.
No obstante, las autoridades de Fort Lauderdale afirmaron que no dudarán en cerrar temporalmente un negocio si se le sorprende infringiendo las normas.
No obstante, las autoridades de Fort Lauderdale afirmaron que no dudarán en cerrar temporalmente un negocio si se le sorprende infringiendo las normas.
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