El Gobierno argentino recibió otro llamado de atención respecto a la reapertura de fronteras y la actividad aerocomercial, que se encuentra suspendida desde abril. En este caso se trata de los países que componen el grupo del G20.
En la reunión extraordinaria del ministro de Relaciones Exteriores del Grupo de los 20 (G20), en la cual participaron por videoconferencia el canciller Felipe Solá y el embajador en los Estados Unidos y sherpa ante el foro, Jorge Argüello, abordaron el levantamiento de las restricciones migratorias. Los ministros de las 20 economías industrializadas más pujantes reconocieron la importancia de reabrir fronteras.
Ante este pedido, el Gobierno comentó que empezará un paulatino programa de reapertura de fronteras bajo criterios epidemiológicos objetivos ante el interés que este tema despierta en las principales potencias mundiales. El canciller Solá comprometió la participación argentina en la estandarización de criterios, en las medidas de las posibilidades; e hizo énfasis en que la vacuna sea de acceso universal.
La decisión adoptada en el pleno del G20 coincidió con un duro pronunciamiento de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) con un fuerte comunicado en el que expresan preocupación por el retraso en la reanudación de los vuelos: “No queremos que el país se convierta en otra Venezuela”. (Ultimátum de IATA a Argentina: “No toleramos más aplazamientos”)
La decisión adoptada en el pleno del G20 coincidió con un duro pronunciamiento de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) con un fuerte comunicado en el que expresan preocupación por el retraso en la reanudación de los vuelos: “No queremos que el país se convierta en otra Venezuela”. (Ultimátum de IATA a Argentina: “No toleramos más aplazamientos”)
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