Si hay algo que debemos tener siempre presente cuando realicemos un viaje, es nuestra seguridad. Al referirme a este término, es importante resaltar la amplitud que conlleva, ya que durante nuestras experiencias en destinos lejanos o incluso dentro de nuestro entorno habitual, puede devenir en un recuerdo no muy agradable. Si bien nuestro país posee características inusuales en términos de seguridad, recuerde que los amigos de lo ajeno, estarán siempre alertas de los descuidos para tomar nuestras pertenencias.
Siendo un tema tan complejo, trataré de sintetizar en 5 pasos una estrategia de prevención que le permitirá estar un paso adelante, sobre quienes pretenden opacar sus experiencias de viaje.
Evita hacer público tus intenciones de viaje. Sobre todo con gente no cercana a tu entorno. Las redes sociales son ventanas abiertas a este tipo información que puede ser aprovechada para pésimas intenciones. Investiga sobre el destino, ten a mano teléfonos de emergencia y, si es posible, la ubicación de los mismos. Lleva contigo copias de todos los documentos de viaje y deja un respaldo de todos ellos, en tu correo electrónico. Una vez en el destino, establece un punto de encuentro ante cualquier eventualidad.
Cuando realicen paseos a pie toma puntos de referencia de cómo llegar al hotel o sitio donde estén pernoctando. Hacer pausas para avistar a todo el grupo o familia siempre será vital. Presta atención sobre todo de los más pequeños. Si van a utilizar algún medio de transporte, pidan recomendaciones a su agente de viajes o en el lugar donde se hospedan. Contacta empresas de traslados bien identificadas. Evita hacer uso de transportes económicos, de dudosa procedencia. Lo barato sale caro.
Al llegar a un parque, restaurante o cualquier establecimiento, identifique y comunique a su grupo las salidas de emergencia. En un restaurante evite sentarse cerca de la entrada principal o el área de caja. Elija una mesa que le permita un amplio campo visual de su entorno. Si se encuentra en un parque temático, establecer puntos de encuentro con horarios, a fin de tener control regular sobre el grupo es una beneficiosa opción. Acuerde una “palabra clave”, esto le permitirá evitar engaños y situaciones de riesgo mayor. Recuérdele a sus niños, no hablar ni recibir nada de extraños.
El sentido común, es el sentido menos común, según algunos. Por tal motivo, les recomiendo que si alguna persona o situación les parece extraña, es porque lo es. La prevención está estrechamente ligada a señales que no somos capaces de distinguir a primera vista. En el entendido que no todos los países tienen las mismas realidades, recuerde que en el mundo de hoy, el terrorismo es un problema público y global. Si no se siente seguro o confiado en el sitio a visitar, retírese sin dudarlo. Año a año la industria turística invierte millones de dólares en planes de prevención y entrenamiento especializado para su personal.
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