El estado de Chihuahua, al norte de México, se perfila como el lugar perfecto para extender la experiencia más allá del fútbol.
Así, mientras todo México, junto con Estados Unidos y Canadá, se prepara para recibir a miles de visitantes durante la Copa Mundial trinacional de la FIFA, 11 de junio - 19 de julio, con partidos en Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey—,
Gracias a su excelente conectividad aérea con las tres sedes mundialistas mexicanas, Chihuahua ofrece a los viajeros una oportunidad única de descubrir un México diferente: insólito, natural y desbordante de autenticidad.
Desde la histórica ciudad capital también llamada Chihuahua, hasta la inmensidad de la Sierra Tarahumara, este destino invita a los visitantes a continuar su viaje con una experiencia que combina aventura, cultura y tranquilidad.
Una conexión sencilla hacia la grandeza natural
El aeropuerto internacional en la capital del estado cuenta con vuelos directos y frecuentes desde Ciudad de México (MEX), Guadalajara (GDL) y Monterrey (MTY), lo que permite llegar fácilmente a Chihuahua en menos de dos horas desde cualquiera de las sedes mundialistas mexicanas, pero también conecta con Dallas, una de las ciudades sede y un importante hub aéreo hacia el resto de las sedes en Estados Unidos y Canadá.
Gracias a esta excelente conectividad, los aficionados al fútbol pueden diseñar un itinerario que combine la emoción del Mundial con la riqueza natural y cultural de Chihuahua.
La magia de la Sierra Tarahumara: el viaje de una vida
Pocas experiencias se comparan con viajar en el Tren Chepe Express, una de las rutas ferroviarias más espectaculares del mundo.
A lo largo de su recorrido, el tren atraviesa montañas, barrancas y comunidades rarámuris, ofreciendo vistas impresionantes del Cañón del Cobre, una formación natural 3 veces más profunda que el Gran Cañón de Colorado.
Además de sus paisajes, Chihuahua ofrece un contacto cercano con la herencia indígena del norte de México, la calidez de sus poblaciones serranas y una gastronomía que fusiona tradición y sabores auténticos. Es el lugar ideal para quienes buscan reconectar con la naturaleza y descubrir una faceta diferente de México.
Un destino insólito sólo para los verdaderos conocedores
Después de la emoción del Mundial, Chihuahua invita a los viajeros con espíritu curioso a prolongar su estancia con una aventura auténtica. Ya sea explorando las huellas del pasado en la ciudad de Chihuahua —que incluso en su momento fue capital del país—, descubriendo las regiones menonitas del norte, recorriendo el Pueblo Mágico de Creel, caminando entre enigmáticas formaciones rocosas, antiguos asentamientos jesuitas y comunidades rarámuri; saboreando su cocina regional o admirando las noches estrelladas al borde de las majestuosas Barrancas del Cobre en Divisadero, antes de abordar el mítico Chepe Express. Chihuahua ofrece el equilibrio perfecto entre aventura, cultura y emoción.
Algunos imperdibles en nuestra visita a Chihuahua
• Explorar el Museo de la Revolución en la antigua Casa de Pancho Villa, un ícono histórico que revive los momentos más intensos de la lucha revolucionaria.
• Visitar una sotolera y descubrir por qué esta bebida artesanal —que conquistó incluso a Lenny Kravitz— está emergiendo como el nuevo destilado estrella del norte de México.
• Degustar un suculento corte de carne acompañado de un vino local, o probar platillos de sabor ahumado elaborados con chiles secos de la región.
• Recorrer el Museo Menonita en la ciudad de Cuauhtémoc, donde se preserva la historia, tradiciones y forma de vida de esta singular comunidad.
• Visitar una comunidad rarámuri y conocer de cerca su cosmovisión, su sincretismo religioso y su profunda conexión con la naturaleza.
• Lanzarte por la tirolesa más larga de Iberoamérica , en el Parque de Aventuras Barrancas del Cobre, y cruzar de un extremo al otro de la imponente barranca a más de 100 km/h.
• Contemplar el atardecer desde Divisadero, donde el paisaje de las Barrancas del Cobre se tiñe de tonos dorados y rojizos, un espectáculo natural único.
• Abordar el legendario Chepe Express, el tren panorámico que serpentea entre montañas, túneles y puentes, ofreciendo vistas inigualables de la Sierra Tarahumara.