Tarde de inmensa alegría
Con música y con cohetes
Y dispuestos los jinetes
A demostrar su baquía
La multitud ya se apresta
A colmar las talanqueras
Y un clarín con voz guerrera
Da el inicio de la fiesta Otto Seijas
Los trabajos con rebaños de ganado a caballo en todas partes del mundo, requieren muchas destrezas y habilidades por parte de las personas que los ejecutan, para hacerlos más eficientes. Enlazar, amarrar, derribar alguna res que se escape del rebaño, amansar un caballo, son algunas de las prácticas que se llevan a cabo en las ganaderías.
Cada región del mundo tiene sus maneras diferentes de manejar los rebaños y muchas de estas costumbres, las han convertido en espectáculos. En el caso de México, las charreadas son un ejemplo de esas destrezas, son mostradas al público como competencias de lazo, doma y derribe. En los Estados Unidos están los famosos rodeos.
En los llanos Venezolanos cuando una res se salía corriendo del rebaño, un jinete la perseguía hasta alcanzarla, agarrarla por la cola y derribarla, por supuesto, ello requiere de un buen jinete, pues conlleva mucho riesgo su ejecución. Cuenta la historia que los dueños de hatos pagaban por ver tumbar a una res en la sabana y entonces, iban todos detrás del toro para ver quién se ganaba la recompensa, es así como nació lo que hoy conocemos como toros coleados.
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