El estacionamiento de la zona arqueológica El Rey, ubicado en la zona hotelera de Cancún y justo frente a Playa Delfines, uno de los lugares más emblemáticos y visitados del destino, presenta un estado deplorable que preocupa tanto a los turistas como a locales.
Pese a su importancia como punto estratégico para el acceso a dos grandes atractivos, no hay señales de mejora a corto plazo.
La problemática resurgió cuando el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) transfirió, el año pasado, el mantenimiento de toda la zona hotelera al gobierno de Quintana Roo. Sin embargo, este terreno específico ha quedado en un limbo administrativo, ya que no se ha definido de manera clara quién tiene la responsabilidad de remozar y mantener esta área que en teoría está a cargo del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Los visitantes se enfrentan a un estacionamiento en pésimas condiciones, lo que contrasta con la importancia histórica de la zona arqueológica El Rey y la belleza de Playa Delfines, reconocida por su icónica escultura del parador fotográfico «Cancún».
El deterioro del estacionamiento no solo afecta la experiencia de los turistas, sino que también daña la imagen del destino. Hasta el momento, ninguna autoridad ha anunciado planes concretos para atender esta situación, dejando a los visitantes y residentes sin un espacio digno, que refleje la calidad y la excelencia que se espera de un destino turístico de renombre internacional como lo es Cancún.
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