Argentina está en la peor situación económica de los últimos años, lo cual tiene mérito dado que el país nunca ha logrado un mínimo de solvencia en sus finanzas. En ese contexto, el presidente del Gobierno, Alberto Fernández, inauguró una nueva terminal de salidas en el aeropuerto de Ezeiza, en Buenos Aires. Tal vez la terminal, capaz de atender 30 millones de pasajeros anuales, está un poco sobredimensionada, muy especialmente en estos momentos (Ezeiza: se inauguró la Nueva Terminal de Partidas)
La nueva terminal se va a destinar sólo a salidas, mientras que las existentes se destinarán todas a llegadas.
En sus palabras de inauguración, el presidente Fernández pidió a los argentinos que no empleen la terminal, debido a que el país no tiene reservas de dólares para que los viajeros puedan llevarse al extranjero. En efecto, el gobierno aplica severas restricciones a los dólares, dado que el Banco Central está con reservas negativas, según indican los economistas independientes.
Ezeiza se convertirá ahora en el aeropuerto más moderno de Latinoamérica, dado que emplea tecnología muy avanzada en esta terminal.
Como era de esperar en un año electoral, la oposición y los medios de comunicación críticos se lanzaron sobre el presidente, haciendo toda clase de bromas sobre la contradicción de inaugurar un aeropuerto para pedir a continuación que no se emplee.
La nueva terminal se va a destinar sólo a salidas, mientras que las existentes se destinarán todas a llegadas.
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