"Por ahora" el teleférico Waraira Repano es una buena opción para los caraqueños, aunque parte de sus instalaciones están cerradas.
S egún el ministro de Turismo, Alejandro Fleming, el estado Vargas tendrá su teleférico, que llegará hasta el Hotel Humboldt, en un plazo de dos años. "Está previsto que el teleférico Waraira Repano-Macuto esté listo en dos años, estamos trabajando con la empresa Dopellmayr, la que se encarga de nuestro teleférico en Mérida". Fleming además comentó que esto ayudará a profundizar las estrategias para incrementar el turismo nacional.
Para la realización de este proyecto se tiene previsto realizar el trabajo de la mano con la comunidad.
La idea es generar también el levantamiento de proyectos conexos y complementarios al Teleférico, que permitan dinamizar en materia integral el sector turístico, así como aportar un cambio cuantitativo y cualitativo en el mejoramiento de las condiciones socioeconómicas de las poblaciones adyacentes, según se lee en una nota de la Agencia Bolivariana de Noticias. De la inversión que hará el Gobierno no se ha difundido información.
A ÚN FUNCIONA
Este nuevo teleférico conectará con las instalaciones de lo que antiguamente se conocía como Ávila Mágica. El Sistema Teleférico Waraira Repano es una de las pocas infraestructuras, de las 762 expropiaciones realizadas por el gobierno nacional, que aún se mantiene en buenas condiciones.
Sin embargo, las tarifas para subir al lugar no son tan solidarias: 35 bolívares por cada adulto y 15 por cada menor entre 4 y 12 años, se traduce en que un grupo familiar de cuatro personas debe cancelar 100 bolívares.
"Puede subir hasta las 7:00pm por el ahorro energético. Si llueve muy duro el sistema se detiene porque las guayas atraen los rayos. En la caja uno cancela el ticket de estacionamiento y si tiene carné estudiantil paga 20 bolos. Pase, pase y estaciona al final", dice un joven en la entrada del estacionamiento un joven que concluye su retahíla turística con el infaltable "si tiene algo que me de para almorzar se lo sabré agradecer".
Para suerte de los visitantes la limpieza de las instalaciones y la buena atención del personal aún se mantiene. A pesar de que el día que Tal Cual hizo el recorrido no había agua (nadie supo responder por qué) los baños y los pisos se encontraban en condiciones óptimas.
La pista de patinaje sobre hielo estaba fuera de servicio "por la lluvia" indicaron los trabajadores. Sin embargo, Margarita Reyes visitaba por tercera vez el teleférico en un lapso de cuatro meses y no había podido usar la pista porque la encontraba cerrada. "Es un mantenimiento demasiado largo", expresó.
Salvo el local de Café Venezuela la propaganda política que aplaude el socialismo se mantiene bajo perfil.
Fotos de paisajes venezolanos e informaciones sobre el Bicentenario adornan las paredes y los quioscos del parque.
Reyes explicó que hace cuatro meses visitó el hotel Humboldt acompañada de un guía, quien explicaba la historia de la edificación, incluso mostraba una "grieta" producida por el terremoto de 1967. Ahora no hay guía, y las áreas que se pueden ver se han reducido, lo que interpreta como un retroceso.
"Por ahora" el Sistema Teleférico sigue siendo una buena opción para el esparcimiento de los caraqueños.
Toca esperar que el ministro de Turismo no se duerma en los laureles con la construcción del nuevo tramo. De lo contrario, dentro de dos años Venezuela podría tener un nuevo candidato para el galardón presidencial "El Morrocoy de Oro". Jessica Carrillo Mazzali / Tal Cual
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