Muchas personas, en su intento de abandonar el país y con la intención de radicarse en cualquier parte del mundo, comenzaron (muy tarde) a preparar su pasaporte para irse, pero el régimen no quiere que se vayan y por eso se está haciendo un plan morrocoy para retardar la entrega de nuevos pasaportes, hasta el punto de que ya no se puedan sacar pasaportes nuevos, tal y como ocurre en Cuba.
Los nuevos pasaportes especiales solo se entregarían en un futuro no muy lejano, a personas que cuenten con el Carnet de la Patria, entre otros requisitos insólitos. Está claro que esto solo son rumores, pero de fuentes verdaderas que saben lo que pasa dentro de las instituciones y que conocen los planes macabros de Nicolás Maduro. Para poder entrar en Venezuela, en el caso de que algún incauto intente volver, deberá traer una cantidad mínima de dólares para ser depositados en el Banco de Venezuela, con la intención de que tengan fondos para mantenerse en el país. Quien no traiga dinero, simplemente no podrá entrar a menos que sea de visita. Este tipo de sistemas se utiliza con mucha frecuencia en otros países en los que les exigen a los emigrantes tener suficiente dinero para mantenerse unos meses mientras arreglan trabajo, y así el seguro social no tenga que encargarse de darles casa y comida.
Además se esperan nuevas leyes con las que se corten aún más los viajes que hacen los venezolanos, que deberán indicar el motivo por el cual abandonan el país, si va a ser un abandono temporal o definitivo, el origen del dinero utilizado para comprar pasajes y estadías y los registros de que no tienen deudas fiscales en el país, pago de impuestos o cuentas que pagarle al estado.
Con estas medidas el régimen de Maduro espera poder controlar cada dólar que salga y evitar que se desperdicie el dinero del petróleo.
Este "Corralito Humano" comenzará a funcionar a principios del 2018, debido a que su implementación va a ser hecha lenta, por fases, pero ya se está avanzando en manera legal, ya que el Tribunal Supremo de Justicia se está encargando de hacer y aprobar estas leyes, pasando por encima de la Asamblea Nacional.
Para quienes no crean en estas informaciones, pueden dirigirse a los departamentos de identificación, consulados, embajadas o centros de emigración, y verán que nadie les dará información acerca de la fecha en la que podremos sacar nuevos pasaportes y en algunos casos cédulas, así como tampoco les dirán el motivo por el cual si hay material para hacer, procesar y distribuir el Carnét de la Patria, del que hasta ahora se sabe muy poco, pero que definitivamente va a convertirse en el documento con el que se controle la alimentación y el movimiento de los venezolanos.
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