(Fototografías: Archivo Diario El Tiempo - Collage: Roberto Prada) |
Las bellezas naturales, atractivos turísticos, imponentes infraestructuras religiosas y la calidez de su gente, posicionan al estado Trujillo como uno de los destinos preferidos durante las temporadas vacacionales.
La entidad trujillana cuenta con un sinfín de opciones para el disfrute de grandes y chicos, ideales en el estrechar lazos familiares. Aunque existen establecimientos privados destinados a la recreación, las áreas públicas continúan siendo las predilectas.
El Monumento Mundial a La Paz y el Santuario del doctor "José Gregorio Hernández", son íconos nacionales e internacionales. No obstante, la población agroturística La Puerta, siempre está colmada de vacacionistas, quienes son atraídos por un agradable clima y las delicias culinarias del terruño andino.
Estos atractivos no le quitan mérito a las aguas termales, en Motatán y Miranda, aunado a los parques, Botánico-Recreativo La Beatriz, en Valera, El Golondrino, en Escuque, Eusebio Baptista y Guaramacal, en Boconó. También, destacan el Monumento al Armisticio, en Pampán, el Centro de Historia, así como la Catedral Nuestra Señora de La Paz, estos dos últimos en la ciudad capital.
Monumento a La Paz
El Monumento a La Paz, es una de las figuras más altas del mundo desde 1.983. Se encuentra ubicado en el municipio Trujillo, tiene una altura de 1.700 metros por encima del nivel del mar y cuenta con cinco miradores, donde se divisan la Ciudad Capital, los Llanos de Monay, Agua Viva, Isnotú, Betijoque, La Cejita, Motatán, Pampanito, la Teta de Niquitao, el Sur del Lago de Maracaibo, la cresta de la Sierra Nevada del estado Mérida y algunas zonas xerófilas de Lara, el Páramo de Árbol Redondo y el Páramo La Cristalina. El Monumento es una obra del arquitecto Manuel de la Fuente, en sus cercanías fue construida una Iglesia en forma circular y con acústica y a muy pocos metros se encuentra la famosa Peña de La Virgen, lugar donde acuden los feligreses a pagar favores recibidos.
Refugio espiritual
El Santuario construido en honor al doctor "José Gregorio Hernández", en el poblado de Isnotú, del municipio Rafael Rangel es un espacio dedicado completamente a la fe, devoción y espiritualidad. Diariamente, y sobre todo en vacaciones, acuden miles de feligreses a conocer la vida y obra de "El Venerable", a pagar promesas o sencillamente a reforzar sus dogmas religiosos. En este lugar se pueden adquirir souvenires típicos de la región andina y alusivos al Médico de los Pobres.