Al norte del estado Carabobo y limitando al sur con los municipios Naguanagua, San Diego y Guacara se encuentra Puerto Cabello, nombre que debe a las mansas aguas que siempre han caracterizado esta costa carabobeña, la cual con de forma atractiva guarda esencia histórica de épocas pasadas.
Durante La Colonia, Puerto Cabello progresó gracias a la Compañía Guipuzcoana, de tal manera que desarrolló a gran escala el comercio a través de la producción del cacao, el café, el algodón y el añil para exportarlas a las islas holandesas.
Pero no todo es historia, hoy por hoy el Casco Histórico de esta pequeña ciudad ha sabido resguardar la legendaria condición de un lugar digno de ser admirado por haber presenciado batallas y encuentros entre grandes próceres venezolanos. Todo esto se ve representado por las agraciadas calles típicas y angostas que rodean la antigua zona del Morian, que en la actualidad se llama Calle Lanceros en honor al General José Antonio Páez.
Al pasear por estas líneas transitables, se encontrarán casas de arquitectura rancia, con ventanas típicas de la tendencia andaluz de España, que recuerdan a quienes las sembraron, y sus balcones –en especial el del Museo de Historia que comunica los dos lados de la calle- que llevan al tiempo en el que los vehículos más rápidos eran los caballos.
Visitar este espacio del municipio es sinónimo de conocer el Malecón, ya que una vez recorrido el fragmento colonial, inevitablemente se cae ante el inmenso horizonte que se encuentra detrás del concreto de esta famosa plaza a la que muchos asisten para admirar los atardeceres o presenciar la entrada y salida de los barcos y buques que cotidianamente llegan al muelle.
Los fines de semana se caracterizan por acoger numerosas personas que usualmente luego de la playa cierran con broche de oro al andar por este muelle turístico en el que sábados y domingos no pueden faltar los protagonistas de la economía informal encargados de ofrecer al visitante desde sus puestos, bisutería, artesanía, bebidas, dulces típicos, entre otros provechos que casi nunca dejan de resultarle atractivos al público.
Además de la caminata que esta zona puede estimular a realizar, tomando en cuenta que está rodeada de mucha cultura histórica por tener en la vía la Catedral de Puerto Cabello, Iglesia San José, que hace poco fue sometida a una remodelación, y la Iglesia El Rosario –lugar de grandes acontecimientos- también se puede contar con buenos sitios para comer, desde lo rápido y preferido por los más pequeños, como una pizzas en la Pizzería Da’ Franco, hasta lo apetitoso del mar en el tradicional restaurante Los Lanceros, ambos lugares ubicados justo frente al Malecón con su respectiva vista al mar, condición que mejora el ambiente de una forma categórica y nativa.
Llegar a este distintivo y potencial espacio recreacional es muy sencillo, ya que sólo a 45 minutos de la ciudad de Valencia se encuentra la carretera el Palito vía Puerto Cabello. Una vez en ella siga las instrucciones hasta la salida en donde encontrará una señal hacia la Zona Histórica que lo llevará a la llegar a la Catedral de Puerto Cabello. De allí fácilmente divisará la Calle Lanceros, el Malecón y La Plaza Bolívar, y sólo quedará iniciar la andanza turística.
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