El turismo médico ha pasado a ser una de las actividades económicas más importantes en República Dominicana, generando divisas más de US$1,300 millones anuales.
Sin embargo, a pesar de que ese segmento representa una valiosa oportunidad para diversificar la economía nacional, fortalecer la marca país y dinamizar cadenas de valor que generan beneficios tanto para el sector público como para el privado, aún falta una estrategia estructurada de promoción internacional del turismo médico.
“La promoción de la República Dominicana como destino de salud debe abordarse con la misma visión estratégica que el turismo tradicional. Contamos con una oferta de valor diferenciada, y es momento de proyectarla con fuerza en mercados internacionales”, señaló Amelia Reyes Mora, vicepresidenta de la Asociación Dominicana de Turismo de Salud (ADTS).
Destacó lo necesario de participar activamente en ferias internacionales, consolidar alianzas con plataformas globales y fortalecer la presencia digital en mercados prioritarios como el Caribe, Norteamérica, Europa y América Latina.
Otras recomendaciones de la ADTS son fomentar certificaciones y acreditaciones internacionales que respalden la calidad y seguridad de los servicios ofrecidos.
También combatir el intrusismo profesional y los centros no acreditados, protegiendo la reputación del país y la seguridad del paciente.
Por igual incluir el turismo médico en las políticas nacionales de exportación de servicios, salud, inversión extranjera y desarrollo turístico, según el Hoy.
Además, sugiere promover incentivos fiscales y mecanismos de financiamiento que estimulen la inversión en infraestructura y capital humano especializado
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