domingo, 24 de julio de 2016

Mochima, playas orientales de gran belleza

Es uno de los lugares naturales más llenos de gracia que usted encontrará en toda Venezuela. Mochima significa "lugar de mucha agua" en lengua cumanagoto. Y es que este parque tiene casi 95.000 hectáreas de naturaleza ingenua, de las cuales más de 80% está en el mar. Posee 6 golfos, 16 bahías, 106 ensenadas, 127 playas y 34 islas. El resto es tierra que está a unos 600 metros de altura en promedio. Por eso en Mochima hay fauna abundante tanto marina como terrestre, y es fácil observar aquí delfines, ballenas arenqueras, tortugas, conejos, venados, y muchos otros animalitos, en un hábitat rodeado de mangles, arrecifes y vegetación tropical.

Las playas de Mochima son célebres entre los turistas, que las consideran de las más bellas en Venezuela: Playa Colorada parece sacada de una tarjeta postal, Arapito posee un tinte de fantasía difícil de conseguir en otras playas, Manare es un paraíso de aguas tranquilas ideales para bucear, Las Maritas es una playa limpia y sensacional, Playa Blanca es muy buscada por los turistas, y todas las islas que hay en Mochima representan el paraíso para los amantes del buceo, y del contacto tranquilo con la naturaleza.

Al llegar su posada en Mochima deja sus maletas y vaya directamente a la playa. Tome una lancha o un peñero y recorra la playa La Piscina, déle una vuelta a la roca del "gato y el ratón", observe los delfines en la bahía, que seguro le perseguirán por un buen rato jugando alrededor del bote. También vaya a la isla de Arapo, que es preciosa. Cuando nosotros fuimos nos encontramos con una procesión en honor de la Virgen del Valle, en la cual una docena de peñeros llevaban la imagen divina por el medio del mar.

Después de ese día tan agitado, le recomiendo ir a comprar artesanía en Los Altos de Santa Fe, que ahora se llama Los Altos de Sucre. Allí nosotros conocimos a una fabricante de lámparas de cerámica llamada Zaira González, que resultó una artista admirable. Sus obras son de una calidad para la exportación, y todo lo hace en su propio taller. Siga al taller TAI, donde María Esther Galbán y Pedro Julio Quintero fabrican y venden piezas de artesanía preciosas, hechas con un gusto increíble. Termine su recorrido por las montañas en una tiendita de esencias, donde venden aceites y pociones de todo tipo. Es una sencilla e impecable casita donde vive Marisabel Rangel, en Los Altos. Desde un restaurante allá arriba obtendrá la mejor vista del Parque Nacional Mochima que permite observar la isla de Margarita en un día sin nubes.
Mochima es un lugar que vale la pena conocer a fondo, por tanto comience ahora mismo y compruebe que la vida es mucho más bella, si recorre todos los rincones de nuestro país.

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