viernes, 3 de febrero de 2012

Rechazan que centro turístico sea una cárcel

La paz y tranquilidad que respiraban los habitantes del municipio Uribante del estado Táchira, gracias a las bondades que ofrece el Complejo Turístico La Trampa, un lugar destinado al descanso, reflexión y recreación familiar, será ahora un centro de rehabilitación para reclusos fármaco-depen- dientes, según denunció Oswaldo Moreno, alcalde de esta jurisdicción.

Moreno manifestó su preocupación al anuncio que hizo la ministra para Servicios Penitenciarios, Iris Valera, en diciembre del año pasado. Para el alcalde el cambio de uso de estas tierras "afecta directamente a la población por el impacto negativo que traerá en el comercio, turismo y tranquilidad de los vecinos de este sector".

El alcalde de Uribante acudió ante la Asamblea Nacional, específicamente a la Comisión de Cultos y Régimen Penitenciario, y destacó que no entiende por qué utilizarán las instalaciones de un centro que sirve para el turismo de aventura, deportes extremos y paseos en lancha, además de que tiene iglesia y cabañas al aire libre, como cárcel. Dijo que, además, el Centro Occidental Penitenciario de Santa Ana, ubicado en el mismo estado, tiene 42 hectáreas libres que "perfectamente pueden ser utilizadas para este mismo fin".

"Cómo nos van a meter un penal en el corazón turístico del Táchira cuando hay otros espacios más adecuados para atender el problema de hacinamiento que viven los penales en este país", indicó Moreno.

El alcalde recordó que en este centro funciona la escuela náutica de remo, vela y canotaje, tiene 200 cabañas que son utilizadas con fines turísticos y que el mismo ex gobernador por el PSUV, Ronald Blanco La Cruz, declaró como Paraíso Turístico del estado Táchira. MARISELA CASTILLO APITZ 




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